Aunque en semanas anteriores ya había visto pequeñas bandadas, de treinta o cuarenta individuos, ayer tuve ocasión de ver la primera gran bandada con un total de unos trescientos cormoranes en la zona de La Marina del Carmolí compañados por su comparsa de gaviotas que me hicieron recordar al verlos el gran espectáculo que supone esta migración.
Bandada de cormoranes grandes ( Phalacrocorax carbo) posados en el agua junto a un grupo no menos despreciable de gaviotas de varias especies.
Quien no quiera perderse este espectáculo que nos ofrece la naturaleza en el Mar Menor, solo tiene que acercarse a la costa de la laguna cualquier día a cualquier hora de aquí en adelante hasta enero aproximadamente , esperar pacientemente con unos prismáticos y en cualquier momento los verá aparecer y sentirá que su espera a válido la pena.
Genial..y los tenemos de vecinos por los Urrutias Beach..así da gusto...saludete, Don José...
ResponderEliminarMe emociono con tu foto (soy tonta, lo sé), me trae recuerdos de antaño que serían largos de explicar y coincido contigo en que vale la pena esperar, la naturaleza siempre lo vale.
ResponderEliminarBesos