martes, 19 de agosto de 2014

MEDUSAS Y MENTIRAS

Desde el día 10 al día 13 de agosto se observó un curioso fenómeno en las orillas del Mar Menor, afectando principalmente a las costas de la población de Los Urrutias, la muerte masiva de medusas “huevo frito” o “marrones” ( Cotilorhyza tuberculata ) y la deposición de sus cadáveres en la orilla de la playa, probablemente debido a las corrientes y vientos de levante predominantes en la zona, aunque realmente habría sido un levante muy moderado el que las habría llevado hasta allí.
Una posible causa de su muerte pudo haber sido el aumento de temperatura que hubo esos días y que de alguna manera esto les hubiera afectado provocándole la muerte. Pero no obstante otros veranos también han hecho temperaturas muy altas, entre los 33º y los 39º, incluso más, y no se ha producido esta muerte masiva de los celentéreos. Por lo que yo no daría por buena del todo esta hipótesis, sino otra de momento desconocida, al menos por mí y creo que para muchos técnicos y tecnócratas de la Comunidad también.

Tampoco me cuadra, si hubiera sido así, como hubieran podido llegar las medusas hasta dentro de las redes “antimedusas” , morirse allí y ser arrastradas a la orilla dentro de estos recintos cerrados, si antes no hubiera medusas dentro de las redes. Evidentemente esas medusas ya estaban dentro de las redes y allí crecieron y no pudieron salir de ellas al encontrarse con la barrera de las redes, ya que estas redes se pusieron a principios de junio este año.

 Medusas atrapadas dentro de la zona de baño de los bañistas en la red "antimedusas" en Los Urrutias

Grupo de medusas de gran tamaño dentro de la zona de baño de los bañistas en Los Urrutias

El hecho no tendría mayor importancia si no fuera por las razones que han dado desde la Administración a la causa y como han “arreglado” el problema. Totalmente falso ya que no han arreglado nada, lo que ha pasado es que ha sido una situación puntual este verano, en el que por las condiciones que se han dado este invierno y no por ninguna solución dada por la Administración, no ha habido gran cantidad de medusas en las orillas donde se baña la gente normalmente. Esto ha pasado ya otros años, como por ejemplo en el 2006 y 2007. Parece ser que cuando hay un invierno más o menos seco, hay menos aporte de nutrientes orgánicos por las ramblas que drenan a la laguna y eso hace que el ciclo de reproducción y crecimiento de las medusas se retrase. Por lo que al cabo de unos días la situación volvió a la normalidad.

Desde luego, y que a nadie le engañen, el fenómeno no se dio porque se hayan roto las redes “antimedusas”, ni porque robaron los plomos que las sostienen al suelo, que ya podían hacerlos de hormigón en lugar de plomo y se ahorrarían este problema de todos los años,  y mucho menos porque las medusas saltaron las redes debido al levante, porque de hecho ya he dicho fue muy moderado, y que yo sepa las medusas por sí solas no saltan las redes. Quién dijo eso mintió o estaba mal informado, todo ello fueron rumores que probablemente se inventó la Administración para dejar tranquilo al ciudadano y la prensa, o peor aún es posible que lo estuvieran diciendo convencidos, demostrando así su ignorancia sobre el tema, ya que en más de treinta años teniendo el problema de las medusas no han sabido solucionarlo, lo único que han hecho es poner parches de cara al turismo que cuestan mucho dinero a los contribuyentes y que un año más le “explotó en su cara”.

Además para más perjuicio, sólo actuaron cuando los vecinos se quejaron a la prensa, porque si no se llegan a quejar no hubieran movido ni un dedo, por supuesto. No obstante su actuación valió para nada, ya que siguieron con los “parches” y seguimos teniendo el mismo problema.

 Medusas pudriéndose en las redes en Los Urrutias

Yo creo, y puede que esté equivocado ya que no soy un experto en el tema, que la solución al problema o al menos la solución parcial, pasaría por hacer una depuradora, que funcione realmente, filtrando las aguas que llegan por la rambla del Albujón llenas de nitratos y fosfatos, herbícidas y pestícidas desde el Campo de Cartagena, ya que como todo el mundo conoce es por donde entra la mayoría de la contaminación química al Mar Menor. Además se deberían tomar muy en serio el“Plan vertido cero al Mar Menor”, para lo que se ha invertido este año 6.5 millones de euros. ¡A ver en qué se lo gastan!

Además algunos días después ( el 17 de agosto de 2014 ), también teníamos esta noticia deen la prensa: La Comunidad y ANSE planean depurar el agua del Mar Menor mediante humedales, parece que por fin la Comunidad se ha decidido a hacerle caso a la organización ecologista, que si que tiene gente competente en el tema de la descontaminación y ecología general de la laguna.

Como dicen que para “muestra un botón”, pues aquí tenéis un vídeo de cómo estaba la situación esos días, que cada uno juzgue y forme su opinión acerca de los remedios al problemas de las medusas y saneamiento del Mar Menor que están poniendo la Comunidad de Murcia y el Ayuntamiento de Cartagena, San Javier y demás ayuntamientos de la Comarca del Mar Menor, para solucionar el tema. Yo tengo clara la mía.

 Estado de las redes "antimedusas" justo un día después de que saliera en el periódico la noticia de que las habían arreglado. 14 de agosto 2014.
A día de hoy, de salida de este artículo 19-08-14, siguen sin arreglarlas y no se ven ya medusas desde hace cuatro días, una prueba más de que estas redes no sirven para la función que se les atribuye, ya que están rotas y deterioradas y no se ven medusas en la zona de baño.

A continuación os dejo el siguiente vídeo. Juzgar vosotros mismos:
 http://youtu.be/8Ca0ohRm1_I

¡Qué quede bien claro!, el que no haya medusas este verano no es porque la Comunidad tomado ninguna medida este año, han sido solamente las condiciones ambientales que se han dado en el Mar Menor durante las distintas estaciones del año las que han provocado que este año hubieran menos celentéreos y el que se haya vuelto a la normalidad, tampoco es porque haya arreglado nada, simplemente que fue un fenómeno puntual y las cosas han vuelto a la normalidad.

martes, 12 de agosto de 2014

EQUINODERMOS EN EL MAR MENOR: Paracentrotus lividus, ¿visitante ocasional?

¿Se quedará en el Mar Menor para siempre o desaparecerá como lo hicieron en su día el berberecho frágil (Fulvia fragilis) y la liebre de mar andrajosa (Bursatella leachi) al cabo de un tiempo?

Es la primera vez después de muchas horas de buceo en la laguna durante los últimos cuatro veranos que veo un erizo común (Paracentrotus lividus). Sería el tercer equinodermo que habitara aquí junto a Holothuria polii y Labidoplax digitata.
 
El nombre del género de Paracentrous lividus viene del griego pará-kentrotós ‘bastante-espinoso’; y el nombre de la especie del latín lividus ‘amoratado’ (Barriuso, 1986)

 Paracentrotus lividus

Esta especie de erizo de mar tiene en común con el resto de equinodermos, la simetría radial. Su caparazón es redondo y aplanado, y sus espinas largas, lisas y robustas, distribuidas en filas longitudinales. La coloración va desde verde oscuro, hasta violeta y marrón. Cada placa ambulacral tiene cinco o seis pares de poros dispuestos en arco. La boca tiene un aparato masticador llamado linterna de Aristóteles, con 5 dientes muy potentes. La boca y el ano se encuentran en extremos opuestos, como puede observarse en las fotografías. Llega a medir 7 cm, aunque el ejemplar encontrado en la isla del Ciervo, no llegaba a los 4 cm –posiblemente era un juvenil.

Paracentrotus lividus puede desplazarse gracias a la acción combinada de sus podios y espinas móviles, pudiendo alcanzar una velocidad de hasta un metro al día para buscar alimento.

Hábitat

Se encuentra en todo el Mediterráneo, y en el Atlántico, en las islas Canarias, Azores y las islas del Canal de la Mancha. Vive en fondos rocosos y en praderas de Posidonia oceánica o Cymodocea nodosa, en zonas más o menos iluminadas.

El ejemplar hallado en el Mar Menor estaba en la zona rocosa de aguas someras de la isla del Ciervo; rocas de origen volcánico cubiertas de la fanerógama marina Cymodocea nodosa y de algas como Laurencia obtusa y Sargassum vulgare; estas especies se hallaban cubiertas de epifitos.

 Isla del Ciervo, una de las islas menores del Mar Menor

Zona donde fue encontrado

 Paracentrotus lividus en el hábitat encontrado

Alimentación

Es herbívoro y se alimenta de las algas o fanerógamas junto a las que vive y también de sus esporas. Es frecuente ver estos erizos cubiertos con hojas de Posidonia oceanica en el Mediterráneo, de conchas, piedras e incluso plásticos para protegerse de la luz intensa.

Reproducción

Tanto los machos como las hembras son iguales externamente y tienen 5 gónadas, desde las que liberan los gametos al agua y donde se produce la fecundación. 

sábado, 2 de agosto de 2014

PECES EN EL MAR MENOR: GÓBIDOS

Los góbidos son una familia de peces bentónicos, es decir que normalmente nadan muy cerca del fondo marino o “pegados” a este. Esto es posible gracias a sus aletas ventrales  unidas en forma de ventosa que les permite adherirse al sustrato del fondo.

Hay unas 600 especies distribuidas por todo el mundo y ocupan toda clase de fondos, ya sean de sustratos blandos o rocosos en aguas saladas o salobres, son carnívoros y ovíparos con fecundación externa.

Su cabeza es grande con respecto del cuerpo y tienen ojos saltones. Sólo tienen escamas algunas especies en algunas partes de su cuerpo, el resto está desprovisto de estas.

 Gobius niger ( Chaparrudo, zorro )

En el Mar Menor se pueden encontrar varias especies de esta familia

Según Alonso Ángel Ramos Esplá y Ángel Pérez Ruzafa en el artículo titulado:”Contribución al conocimiento de la ictiofauna bentónica del Mar Menor ( SE España ) y su distribución binómica”. Las especies de góbidos presentes en el Mar Menor serían: Gobius niger Linaeus, 1758, Gobius cobitis ( Pallas, 1814 ), Gobius paganellus Lineaus, 1758 , Pomatochistus microps ( Kroyer, 1838 ), Pomatochistus marmoratus ( Risso, 1810 ), Millerigobius macrocephalus ( Colombatovic, 1810 ).
Citan Gobius paganellus como especie de colonización reciente, debido al escaso número de ejemplares que encontraron, y Pomatochistus marmoratus también lo consideran raro, ya que sólo encontraron un ejemplar donde no había población de Pomatochistus microps, sin embargo Gobius cobitis lo consideran residente.

En este estudio se citan por primera vez en la laguna Gobius paganellus, Pomatochistus Pomatochistus marmoratus y Millerigobius macrocephalus.

Según Alonso Ángel Ramos Esplá y Ángel Pérez Ruzafa en el artículo titulado: “Presencia de Millerigobius macrocephalus en el Mediterráneo occidental, con notas sobre su Biología”. Publicado en el número 11 de Anales de la Biología en 1987. Se habría encontrado un número relativamente elevado de ejemplares de dicha especie en el muestreo hecho en el Mar Menor sobre pradera de Cimodocea nodosa-Caulerpa prolifera. Según el estudio la variedad de tallas y grado de madurez sexual sugerirían una población estable en dicha laguna.

Según el estudio titulado: “Ictiofauna de zonas someras del Mar Menor ( SE de la Península Ibérica ): especies con presencia de alevines y juveniles “ ( F.J. Oliva Paterna, A. Andreu, P.A. Miñano, D. Verdell, A. Caballero, A. Egea, J.A. de Maya, A. Ruíz Navarro & M. Torralba) publicado en el número 25 de Anales de la biología en 2003, pero cuyo estudio se hizo entre el verano de 2002 y el invierno de 2002-2003. Las especies de góbidos presentes en el Mar Menor serían: Pomatochistus marmoratus (Risso, 1810 ), Gobius niger  Lineaus , ( 1758 ), Gobius paganellus Lineaus, ( 1758 ), Gobius bucchichi Steinchdachner, 1870.

Todos con un estatus de conservación no evaluado y prácticamente con la misma abundancia en verano que en invierno, excepto el Gobius bucchichi más abundante en invierno.

Según la comunicación de 2004, titulada: “Y-O-Y fish species richness in the litoral shallow of a meso-saline coastal lagoon ( Mar Menor, Mediterranean coast of a iberian Peninsula )” (F.J. Oliva Paterna, A. Andreu, P.A. Miñano, D. Verdell, A. Caballero, A. Egea, J.A. de Maya, A. Ruíz Navarro, J. García Alonso, C. Fernández-Delgado & M. Torralba). Las especies de góbidos en el Mar Menor serían: Pomatochistus s.p. ( Risso, 1810 ), Gobius niger  Lineaus , ( 1758 ), Gobius paganellus Lineaus, ( 1758 ), Gobius bucchichi Steinchdachner, 1870, Gobius cobitis ( Pallas, 1814 ).

Ninguna de las especies citadas en la comunicación tenía un  estatus de conservación evaluado en 2004. Y el estudio comprende el período de tiempo desde enero de 2002 hasta marzo de 2004.

Según la publicación: “La comunidad de peces de las zonas someras litorales del Mar Menor” (F.J. Oliva Paterna, A. Andreu, P.A. Miñano, D. Verdell, A. Caballero, A. Egea,  A. Ruíz Navarro, & M. Torralba ). Publicado por la revista Eubacteria. Las especies de góbidos presentes en el Mar Menor serían: Pomatochistus marmoratus (Risso, 1810 ), Gobius niger  Lineaus , ( 1758 ), Gobius paganellus Lineaus, ( 1758 ), Gobius bucchichi Steinchdachner, 1870, Gobius cobitis ( Pallas, 1814 .

Según la tesis de D. Verdiell titulada: “Ictiofauna de las zonas someras litorales del Mar Menor ( SE, Península ibérica ): Parámetros de su biología y relaciones con el hábitat”. Publicado en 2009. Las especies de góbidos presentes en el Mar Menor serían: Pomatochistus marmoratus ( Risso, 1810 ), Gobius niger  Lineaus , ( 1758 ), Gobius paganellus Lineaus, ( 1758 ), Gobius bucchichi Steinchdachner, 1870, Gobius cobitis (Pallas, 1814 ). 

Todas ellas con estatus ecológico de residentes.

En mis observaciones directas he podido constatar la presencia de Pomatochistus sp, Gobius cobitis, Gobius bucchichi y Gobius niger. Por lo tanto estas son las especies sobre las que voy a escribir en los siguientes artículos dedicado cada uno a una ficha de una especie diferente de estos góbidos.